22 nov 2009

Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus.

Aunque este tema se pueda considerar facilón por lo recurrente que es, no se tiene porque ver así.
Según van pasando los años y las relaciones (evidentemente todas gafadas, sino no estaría escribiendo esto) me doy cuenta de que aunque ambos seamos personas, hablamos idiomas completamente distintos. Y no solo el habla es diferente, sino también la forma de pensar, los sentimientos, el como nos tomamos las cosas (aquí por supuesto nosotras siempre somos las tremendistas, pero yo prefiero pensar que somos las mas practicas).
Me he dado cuenta que el pensamiento del hombre es mas lineal, comparándolo con el nuestro que es como una montaña rusa, siempre subiendo y bajando. Ellos ven las cosas de un par de colores, pueden ser gris y blanco, lo malo es que nosotras llegamos a ver la gama entera, incluyendo los tonos pastel con todas sus ramificaciones y mezclas. Esto desemboca en la cantidad de vueltas que damos a todas las cosas, cosas que para ellos son insignificantes. Una mujer siente, y siente con todo su ser. Sufre y es la más infeliz, ríe y es la que mas brilla, llora y el mundo nunca llora con ella el tiempo suficiente. El hombre en cambio es mas practico, analiza las cosas, o demasiado o demasiado poco, dependiendo del caso.
Nosotras somos inconformistas por naturaleza, en la relación siempre vamos a dar mas y, claro esta, siempre esperamos recibir mas. Ahí es cuando se nota que no hablamos el mismo idioma. Ellos dan por echo de que sabemos todo lo que nos quieren, que sin decirnos nada somos adivinas y vemos que besan el suelo por donde pisamos, pero no...Ahí es el mayor error de todos los machos, por mucho que tú pienses que lo sabemos nosotras necesitamos oírlo. No mucho ni todos los días, pero si de vez en cuando.
A lo largo del tiempo, he observado que se nos toma por neuróticas por no tener paciencia para las cosas, el problema no es la paciencia, es que cuando sentimos deseamos que la otra persona también sienta siendo un verdadero palo que ni nos entiendan ni lo compartan. Podemos ser agobiantes, arpías, celosas y un largo etc... pero es porque amamos y queremos que ese amor sea correspondido. Así que después de varios años he llegado a la conclusión de que voy a intentar encontrar un diccionario marciano-venusiano para ver si somos capaces de entendernos, ya que sino estaremos condenados a entendernos con nuestras mascotas y eso no me mola nada.

3 oct 2009

No sin mis zapatos (la fidelidad desde otro punto de vista)

Ayer de noche, hablando con una persona de todo un poco de lo que hay en este (a veces) asqueroso mundo, le confesé que estaba enamorada .....de mis zapatos.
El, como buen hombre que es y por lo tanto no entendedor de los complejos engranajes de un cerebro femenino, simplemente me miró como si hubiera perdido alguno de los pocos tornillos que me quedan. Por suerte, estoy acostumbrada a que me observen así el 90% de las veces. Le respondí que aunque no lo pareciese todavía tenía la cabeza en mi sitio y las neuronas funcionando. Me observó a la espera de que le diese una explicación medio coherente a tan rotunda afirmación que acababa de soltar hacía escasos segundos.
Esto es muy sencillo, comencé. Todas las mujeres estamos enamoradas de nuestros zapatos. Otra cosa es que lo confesemos. ¿Y porqué?, me preguntó. No lo entiendo. Son solo zapatos, explicó con cara de circunstancia. Te llevan a donde quieres y son cómodos, te pueden gustar mucho, pero de ahí a estar enajenados por ellos hay un abismo. Yo le repliqué que no es tan sencillo, que primero debería meterse en la cabeza de una fémina para ser capaz de comprenderlo.
La razón porque estamos encoñadas con los zapatos es porque, aparte de los perros y algún gato de carácter excepcional, el calzado en general y los zapatos en particular son fieles, completamente e incondicionalmente leales. Tus zapatos (excepto si calzáis el mismo número y ni con esas), no se van a ir ni con tu mejor amiga ni con la primera cualquiera que vean por ahí. Son tuyos, solamente tuyos y ellos lo saben. Aguantan lo inaguantable. Los usas, los llenas de mierda (todos hemos pisado caca de animalitos), los pisas tu misma y te los pisan, les levantas la piel por mal uso, puedes llegar a romper el tacón por hacer alguna barrabasada, llegas a casa tan cansada que lo primero que haces es quitártelos y azotarlos a algún rincón. Y ellos siguen contigo. No se quejan, no tienes que ver como prefieren ver el partido antes que estar contigo, se adaptan completamente a tus pies, a tu forma de caminar. Sabes que te aman, que no les importa que les uses, que te necesitan. Te entienden. Cuando estas depre te calzas tus mejores botas y vas a por otro par de zapatos y ellos no se ponen celosos. Para ellos nunca has engordado y siempre estas muy guapa. Has llorado encima de ellos. Se los has tirado a aquel cabrón que no te quería y que encima te utilizó y ellos, como buenos amigos, maniobraban de tal manera que siempre apuntaban con el tacón.
Por esto las mujeres amamos a nuestros zapatos. Son devotos de tal manera que nadie es capaz de hacerles sombra. Están ahí para las cosas buenas y las malas.
Todas estas cosas son las que hacen que cuando tenemos un flechazo con ese par de sandalias, esas princesitas etc...se nos pase un poquito cualquier depresión que tengamos, porque sabemos que acabamos de encontrar una de las relaciones mas duraderas y verdaderas de nuestra vida.
Por todo esto es por lo que yo prefiero un buen par de botas a un buen par de hombres. Me duran mas las primeras que los segundos.

29 ago 2009

¿Qué fue primero? ¿El sexo o el amor?

Tengo ganas de tocar este tema porque es muy especial. Sexo y Amor. ¿Pueden ir de la mano? o ¿son algo tan distinto que no se pueden acoplar el uno al otro?.
Cuando hablamos de Amor (y lo escribo en mayúscula), nos solemos referir a un sentimiento, a un anhelo que tenemos, a una ilusión. Pero nunca se suele incluir el Sexo en esta ecuación. Para mucha gente son dos cosas completamente distintas, pero para otras personas son cosas que se complementan. Y en todo este guirigay ¿quién narices tiene la razón?. Para mi el amor es un sentimiento muy fuerte que tengo por la persona que me gusta, pero el sexo es lo que complementa esa relación y hace que sea mas enriquecedora. No digo que sea lo mas importante, pero si es una de las que si fallan....por mucho que le quieras termina minando la relación. Pensando me he dado cuenta de una cosa muy rara. Si tenía buen sexo, aunque la relación no fuese la mejor, esta solía durar un poco mas de la media e intentaba tirar por ella. Pero si tenía una mala vida sexual, se finiquitaba la conquista más rápido aún de lo que había empezado.
Todo esto ha ido cambiando con los años (aunque hoy en día siga pensando que una vida sexual satisfactoria es uno de los grandes pilares de una pareja). Ha cambiado la manera de aplicarlo, pero no la idea.
Tengo un amigo que no comparte mi forma de pensar para nada. El es de la opinión de que el sexo no existe ( a ver..no que no exista, pero todo tiene que ser mas suave, no es sexo, si no hacer el amor). Yo me quede pensativa y le pregunté si nunca, dentro de la relación, había sentido la pasión, el deseo de arrancar a la otra persona la ropa y hacerla tuya. Si nunca había experimentado un deseo carnal puro. El me respondió que no concibe el sexo sin amor. Que las caricias que se dan cuando está implicado el corazón son completamente distintas a las que serían solo por placer puro y duro.
Yo por un lado estoy de acuerdo con el. Evidentemente si quieres a la persona es mucho mejor, pero esto es como el tequila....solo está buenísimo, pero se le pones un poquito de limón y una pizca de sal...el tequila sabe muchísimo mejor.

22 ago 2009

Antes, durante y después.

Lo que nos gusta complicarnos la vida a las mujeres. Tenemos un camino asfaltado delante de nosotras. En el no existe la maleza ni las malas hierbas. Las piedrecitas que normalmente nos entran en los zapatos han sido quitadas para no molestar. Es una zona en la que sabemos que no vamos a tener peligro de derrumbe. Pero ¡no¡, no escogemos ese camino. ¡Por favor¡ nos encanta darnos un poco por **** y elegimos el que está mas tétrico, el camino que tiene picos y salientes en los que hacernos daño, el camino en el cual sabemos que vamos a salir lastimadas.
Os preguntareis a que viene todo este rollo. Pues es muy sencillo. Quiero hablar sobre el poder de la decisión, de la elección de la persona (que en teoría) queremos que pase con nosotras...pues el tiempo que sea.
Normalmente las mujeres, en cuando encuentran un hombre que las haga más o menos felices, saben que va a aparecer otro para desbaratarlas los planes (otro o un ex, que también es bastante habitual). Y como no faltaba más, donde antes todo estaba muy claro, el cielo se torna de un color grisáceo tirando para negro total. Ahí es cuando nos entran las dudas.
¿Será este el definitivo, el que me quiera y me proteja de todo? ¿El que me impida que me caiga y que quiera compartir mis sueños? O, en realidad, ¿es este que acabo de conocer la persona correcta?¿la persona que sabrá hacerme vibrar en todos los sentidos de mi vida?.
Malo....muy malo. En cuestión de unos segundos, nuestra cabeza se llena de interrogantes. Y dudamos. Pero que malo es dudar. Ahora la gran pregunta es porque dudamos. Puede ser porque igual no nos interesa lo suficiente la primera persona, porque nos guste complicarnos la vida (de esto conozco muchísimos casos) o porque en realidad tenemos pánico a darnos a conocer.
Basado en mi experiencia y en la de mis amigas, llegué a la conclusión de que es por el miedo a compartir y dar una parte de nosotras para que luego igual (y digo solo igual) nos la devuelvan completamente destrozada.
No queremos abrirnos por miedo al daño, al rechazo de la persona que hace que temblemos, suspiremos y que consigue hacernos soñar despiertas. No nos gusta sentir que la otra persona tiene un poder tan grande, no nos gusta que lo que sentimos se muestre tan claramente. Y por eso, cuando vemos que existe esa posibilidad de que conquisten nuestro pequeño mundo decidimos que es hora de huir. Y todo porque tenemos miedo a que nos rompan el corazón.
Lo malo de esto es que igual nos estamos perdiendo la aventura más grande de nuestras vidas. Igual, estamos echando tierra sobre nuestro propio tejado e impidiéndonos ser realmente felices. Igual, y repito, solo igual, en el fondo de nuestro corazón hemos decidido que no merecemos la pena. Que no somos lo suficientemente buenas o que no hemos hecho nada para ganarnos esa alegría. Y ahí, es donde empiezan los problemas, porque para que alguien nos quiera y nos acepte tenemos que hacerlo primero nosotras.

25 jul 2009

Amor, sexo o demasiados orfidales (porque nunca sabemos lo que quieren)

Otro día mas, mas preguntas en mi cabeza y ninguna respuesta (eso por supuesto). Después de varias relaciones completamente desastrosas yo me cuestiono que es lo que ha fallado para que ninguna de ellas fructiferase.
La respuesta es demasiado sencilla. Solo he tenido un minúsculo fallo, relacionarme con deficientes emocionales. Es decir, hombres (por llamarlos de alguna manera que no sea ofensiva y se considere políticamente correcta), que no poseen inteligencia emocional, mejor dicho, no tienen neuronas que se puedan aplicar a los sentimientos de pareja.
Mi buena amiga M, me comentaba ayer de noche que todavía no entendía cual era su problema para poder desarrollar una relación adulta basada en el amor, la confianza y una buena conversación. No sabía si era que la tenían miedo, que no tenía el gancho suficiente o si podía ser que ella era demasiado intransigente. Después de estar un rato pensativa la respondí lo que yo creo que es la respuesta más lógica (basada en mi experiencia).
Los hombres en el fondo son unos cobardes. Mi último ex me dejó porque llevábamos una semana discutiendo mucho y el no veía que hubiera futuro, pero sobre todo me dejó porque me quería o queriendome (cosa que todavía no entiendo ni entenderé). El anterior a el.....cuando vio que íbamos demasiado en serio y que le estaba atando corto decidió ponerme los cuernos. Y el anterior a ese, era demasiado subnormal en general. Así que mi punto de vista sobre el tema no es demasiado caritativo. Yo la comenté que por regla general nos solemos crear unas expectativas con ellos que no se cumplen, pero que ellos con nosotras piensan que van a tener un mundo color de rosa y la cosa no va así. Piensan que por el mero echo de ser mujeres nos convertiremos en plastilina para así poder moldearnos a su antojo. Empiezan diciendonos que tenemos muy buen cuerpo, pero...(ahí esta el gran pero) que no vendría nada mal ir a gym para tonificarlo un poco. En ese momento es cuando pongo mi cara de: ¡Claro¡, esperame allí que voy corriendo (evidentemente mi deporte preferido es el que se practique en un sofá). Nos comentan de pasada ( y por supuesto como quien no quiere la cosa) que aunque estamos preciosas en pantalones vaqueros y con coleta,un pequeño top con una bonita mini-falda no nos vendría nada mal. Y esto lo hacen todo desde el amor. Pero lo que mas me fastidia de todo lo que dicen y lo que no hacen es que supuestamente ellos se enamoraron de nosotras por lo que somos, no por lo que deberíamos ser. Les encantaba que tubieramos carácter y no nos callásemos las cosas. Nos decían que no querían una mujer sin personalidad. Y el problema llegó cuando se dieron cuenta de que no podían cambiarnos. Todos esos rasgos perfectos se convirtieron en defectos insalvables. Y nos dejaron, así de simple y de claro. La mayoría de los hombres tienen pánico a una mujer de verdad y cuando se encuentran a una en vez de intentar aprender deciden huir todo lo que sus pies se lo permite. Por suerte no son todos iguales...lo malo de esto es que estoy esperando encontrar uno diferente. Y mi amiga también.

19 jul 2009

Carta de Presentación

Hola a todo el mundo:

Antes de ponerme a escribir todas las cosas absurdas que me he encontrado yo, que han visto mis amig@s o que en algún momento de nuestra vida hemos propuesto a otras personas, quiero comentar que en este blog se va a poder hablar absolutamente de todo, eso si, solo pido un respeto hacia las personas y las opiniones que se viertan aquí.
Este blog lo he creado como un medio para que la gente pueda opinar y sobre todo para que se puedan resolver dudas sobre el sexo, quitar miedo o simplemente reírse un poco con lo que nos llegamos a encontrar por ahí.
Así que un saludo muy grande para tod@s y espero que lo disfrutéis.